El Creador instituye Shabbat para nosotros como regalo y como un potente recurso de Sanación Total, en nuestros niveles de Guf, Néfesh, Rúaj y Neshamá. Lo hacemos siguiendo el primer precepto de Recordar: “Zajor”, no solo el Shabbat, sino lo Santos que somos desde el Origen y como remembranza del Propósito por el cual vinimos a este mundo. Por eso se hace el Séptimo día, que corresponde con la Séptima Sefirá, Maljut, donde estamos haciendo nuestra obra de Santificación.
El segundo precepto es Santificar: “Shamor”. Esto es, hacernos Santos, que es lo mismo que Sanos, en todos nuestros niveles, atrayendo la santidad que somos en los niveles superiores. Nos lleva a involucrarnos con nuestro Jayá y Yejidá, a través de la invitación expresa y particular que nos hace El Creador de Visitarlo en sus Aposentos Santos, para lo cual debemos elevarnos en Santidad y Pureza, de la misma manera que sucedió en el monte Sinaí, cuando fuimos invitados ante Su Presencia y fuimos sanados en nuestra Totalidad de Ser.
Para eso, fueron instituidos, una serie de pasos en un orden (Seder) específico, que nos sanan o santifican, llevándonos en un recorrido de éxtasis y regocijo durante todo el Sábado Santo, que inicia con la excitación del Shabbat el Viernes en la mañana y finaliza con Havdalá en la noche del Sábado.
Recordar “Zajor”.
El ejercicio de Vivir esta experiencia específica de Espacio-Tiempo-Movimiento, tiene dos objetivos principales:
El primero, cumplir con la Voluntad de El Creador de ser Co-Creadores con Él, actuando como representantes de Su Santidad, representada como Luz, en este nivel de Maljút, carente de luz propia. Para eso, planteamos un Propósito Primario Individual, que nos es aprobado antes de venir a esta encarnación.
Pero, en el ejercicio de vivir, solemos desviarnos de ese Propósito Primario, de acuerdo con las experiencias de nuestro Ego, quien recoge la Información de Campo para apoyarnos en nuestro proceso de aprendizaje. Esto genera Desbalances o desajustes en la sincronía que involucra a la Información-Energía que estamos manipulando.
A eso se refiere el segundo aspecto por el cual decidimos venir a tener esta experiencia, y es corregir, por decirlo de alguna manera, esos desbalances y devolvernos al camino que nos conduce a nuestro proceso de Elevación de Consciencia.
Y cómo funciona: Sabemos que Somos Consciencia Pura, pero ya dentro de la vivencia en Maljut, nos movemos en medio de dos niveles de consciencia básicos: la Supra consciencia y la Infra consciencia. La Supra Consciencia está constituida por la Consciencia del Cuerpo, la Consciencia del Alma y la Consciencia Universal. Y la Infra Consciencia, corresponde con la consciencia del cuerpo, que es la consciencia de la Fisicalidad y está constituida por la Consciencia, Subconsciencia e Inconciencia, estudiadas y planteadas por la sicología contemporánea.
La decisión de venir a vivir esta experiencia de Espacio- Tiempo-Movimiento, involucra conocer la Consciencia del Cuerpo y obtener de ahí, los aprendizajes necesarios para conectarla con la consciencia del Alma. Y, de esta manera, elevar la consciencia de la Fisicalidad, llevándola a niveles menos densos que le permitan elevarse y transitar por los mundos superiores.
Es ahí donde entra Shabbat como recurso, que nos enseña cómo recorrer esos niveles de consciencia más elevados sin lastimarnos y sanando los desbalances que hemos encontrado en los 6 días de trabajo en el nivel de Maljut.
Santificar “Shamor”.
Transmutación. Corrección.
Dentro de las oraciones o Sidur de Kabbalat Shabbat, se encuentra muy claro el proceso de Sanación que nos permite elevarnos a la categoría de Co-Creadores para asistir a la asamblea a la que nos está invitando El Creador cada viernes en la noche. Este proceso hace un recorrido por las diferentes Consciencias y nos permite poner en cero la pizarra e iniciar la semana con una disposición nueva y un nivel distinto, más elevado y conectado con los aspectos superiores de nuestro Ser Integral
-
- Revisar la herida… Salmo 29. Este Salmo nos permite identificar y reconocer las heridas que se han generado en nosotros durante los 6 días de la semana y que han sido causadas en cada acontecimiento, a partir del Secuestro de las Inteligencias-Energías que vienen bajando desde Biná y fueron entregadas a nuestro Rúaj para ser manifestadas en Maljút.
- Limpiar la herida… Ana bakoaj. Entendiendo el para qué sucedieron esos acontecimientos en nuestra vida y sabiendo que nosotros mismos los hemos atraído con nuestras acciones en este nivel de Causa-Efecto, podemos limpiar el dolor que ellos causaron y salir de los estados de Sufrimiento que hemos creado, atrapando la Chispa de Luz que hay en ese instante de aprendizaje y que quedó atrapada en nuestra línea de tiempo.
- Reparar la herida… Lejá dodí. Se exige de parte nuestra un Cambio de Actitud, donde reconocemos que No Somos el Pobrecito y dejamos la posición de víctimas. Es como sucede con un vaso que está roto. Se repara y tiene que volver a llenarse de luz. Somos los carceleros de la chispa. La tenemos atrapada por falta de consciencia y la utiliza nuestro Ego como recurso para llamar la atención. Debemos entender que la Enfermedad no existe, es solo una Inteligencia que, al sanar, deja de ser Mortal y se eleva a la Es ahí cuando se libera la chispa.
- Alcanzas el 1º Logro: Adición de la 1ª Alma del nivel del Nefesh. Estas son Inteligencias adicionales que te son entregadas de acuerdo con la grandeza del proceso que has realizado. Entre más grande sea el proceso de Entendimiento, más grande es el alma que se te adiciona.
- Reconocer la enseñanza en ese acto creativo… salmo 92. Aquí de produce un Cambio de Creencia, como resultado del proceso vivido anteriormente. No solo es reconocer que ha sido Nuestra Creación, sino que debe generar Gratitud al Maestro, quien intervino en el acto y generó el dolor. Finalmente sabemos que, por estar en este nivel de Causa-Efecto, deberá pagar un precio por lo que hizo y es algo que esa alma hace en un profundo acto de
- Reconocer que es Providencia Divina… salmo 93. Con este salmo tienes la posibilidad de Asumirte a tu mismo como Co-Creador. Tu escogiste esa lección para obtener una enseñanza a través de ella. Decides entonces elegir la Torá como medio de elevación y no la enfermedad
Continuará...